El día de hoy marca un momento crucial en el compromiso de la Unión Europea con la sostenibilidad y la responsabilidad corporativa. Los Estados miembros de la UE han llegado a un consenso sobre la Directiva de Diligencia Debida en materia de Sostenibilidad Corporativa (DCSD), que establece un nuevo punto de referencia para la conducta empresarial en toda la Unión. Este acuerdo elabora un marco que obliga a las empresas a integrar prácticas sostenibles y diligencia debida en sus operaciones.
Heidi Hautala, vicepresidenta del Parlamento Europeo y presidenta del Grupo de Trabajo sobre Conducta Empresarial Responsable (RBC wg) del Parlamento Europeo, comparte:
"Los beneficiarios de la CDSD serán los millones de personas afectadas por la esclavitud moderna, junto con otras víctimas de negligencia y abuso corporativo. Las empresas responsables también se beneficiarán de la igualdad de condiciones, y habrá un compromiso más sólido de las empresas en la lucha contra el cambio climático".
Después de extensas negociaciones y compromisos, los Estados miembros de la UE finalizaron el texto de la CDSD. Este acuerdo representa un paso crucial hacia su adopción e implementación formal.
Esta directiva afectará ahora a unas 5.400 empresas europeas, reduciendo significativamente el ámbito de aplicación original en casi un 70% hasta el 0,05% de todas las empresas. A pesar de este considerable ajuste, se espera que la directiva ejerza una influencia más amplia, afectando a las empresas más pequeñas a través de un "efecto de goteo".
A pesar de sus desafíos y obligaciones, la CDSD ofrece varias ventajas para las empresas, desde el establecimiento de condiciones equitativas y la protección de la reputación hasta la mejora de la sostenibilidad a largo plazo, la mitigación de riesgos y la resiliencia.
El siguiente paso para la CDSD es su presentación para su votación en el Parlamento Europeo, que se espera que tenga lugar a mediados de abril.
La CDSD es un testimonio de los esfuerzos continuos de la UE para promover prácticas empresariales sostenibles y responsables. Al establecer normas estrictas para la diligencia debida y la sostenibilidad, la directiva no solo tiene como objetivo proteger los derechos y el bienestar de las personas afectadas por las operaciones corporativas, sino también fomentar un entorno empresarial más sostenible, resiliente y equitativo. A medida que anticipamos su adopción e implementación, la CDSD se erige como un paso significativo hacia un futuro sostenible para todos.
Bernd posee una amplia experiencia en adquisiciones estratégicas, moldeada por su permanencia en Eckes-Granini, Symrise y DuPont de Nemours. Actualmente, se centra en el abastecimiento sostenible y las cadenas de suministro, colaborando con el equipo de relatico para desarrollar soluciones de software prácticas. Además, Bernd dirige su propio negocio agrícola y participa en proyectos de cadena de suministro a nivel mundial.